El fabricante de explosivos Maxam señalado por Zelenski tiene cuatro filiales en Rusia intervenidas por Putin
Los empleados de la multinacional española Maxam se han quedado «paralizados» cuando el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha mencionado esta tarde, ante el Congreso de los Diputados, a la compañía centenaria de explosivos, solicitando que deje de hacer negocios en Rusia.
«Nos hemos quedado paralizados, no lo entendemos», comentan fuentes del grupo español consultadas por este diario.
El grupo Maxam cuenta con cuatro filiales en Rusia, de acuerdo a las mismas fuentes, especializadas en la fabricación de explosivos empleados en minería.
Pero las filiales de Maxam en Rusia «están intervenidas desde el inicio de la invasión de Ucrania», indican. «El Gobierno ruso no permite desde entonces la recogida de dividendos de nuestras filiales allí», explican las mismas fuentes.
Además, indican que el Gobierno de Putin ha advertido de que las empresas extranjeras que, como Maxam, están presentes en Rusia y suspendan la actividad «podrán ser expropiadas o el Gobierno poder decidir su quiebra».
«Los productos que fabricamos allí no pueden ser empleados con fines bélicos», aseguran las mismas fuentes consultadas por OKDIARIO en Maxam, compañía que emplea a cerca de 5.000 personas.
De acuerdo a las cuentas de Maxam consultadas por este diario, el grupo cuenta con cuatro filiales en Rusia -LLC Eastern Mining Services; LCCUEE Siberia; HTIS; y LLC Maxam Rusia-, que en conjunto suman una cifra de patrimonio de unos 23 millones de euros.
El grupo Maxam facturó 1.002 millones de euros en 2020 (127 millones menos que en 2019) y registró pérdidas por importe de 135 millones (frente a ganancias de 20 millones un año antes), según las cuentas presentadas por la compañía con motivo de una emisión de deuda a las que ha accedido este diario.
La multinacional española cerró el ejercicio 2020 con un incremento de la deuda, hasta los 692 millones. El grupo logró refinanciar la deuda con los bancos acreedores con los que firmó un crédito sindicado de 600 millones en julio de 2019.
Los orígenes de la multinacional española se remontan a la Sociedad Española de la Pólvora creada por Alfred Nobel en 1872. Desde principios de este siglo, diversos grupos de capital riesgo han ido adquiriendo participaciones. En la actualidad la compañía está controlada por el fondo estadounidense Rhône Capital.